Culebrón 'Guaje'

El culebrón del verano tiene nombre y apellido: David Villa. Tras superar con éxito las contrataciones de los dos galácticos que más apetecian a la afición madridista desde hace años, y, cuando todo parecía apuntar a que el delantero valencianista vestiría de blanco merengue junto a ellos, se ha producido un "aparente" paso atrás en la operación, y , salvo ¿sorpresa mayúscula?, el Guaje no será un habitual en Valdebevas la próxima temporada.

Los motivos oficiales hablan de que no se vuelva a repetir un caso Mijatovic, dicho por boca del nuevo, conocido y flamante presidente, que en su día generó una gran oleada antimadridista por tierras levantinas. Esta curiosa reacción sucede tras entrometerse el F.C Barcelona, el Manchester United y el Chelsea en el traspaso con suculentas ofertas para un Valencia en crisis económica, y, tras haberse roto un primer acuerdo con el Real Madrid por una cantidad mucho menor a la ofrecida posteriormente por dichos clubes. ¿Es una estrategia a sabiendas que el jugador está deseando pertenecer al nuevo y ambicioso proyecto?, ¿Es un tira y afloja para rebajar su precio y rondar la cifra que se estableció en un principio? Un servidor no tiene ninguna duda. Si por algo se ha caracterizado siempre Florentino Pérez ha sido por sus habilidades en las negociaciones para firmar futbolistas y el tiempo dirá si esta forma de trabajar es efectiva o no. Por eso se habla de segundas opciones, por eso se pone en el punto de mira al uruguayo Diego Forlán o al francés Karim Benzema. ¿Entonces vendrá Villa al Real Madrid? Apostaría a que sí. A pesar de no haberlo dicho abiertamente, el asturiano está deseandolo y, él para el Madrid es toda una prioridad.

Queda mucho verano, y mucha tela que cortar. Si la situación no se le va de las manos a la directiva, probablemente, no haya problemas para terminar convenciendo al Valencia y zanjar el acuerdo en un punto intermedio, pues, eso sí, la oportunidad lo merece. El jugador es un auténtico goleador de los que hacen época, es español, va camino de convertirse en una leyenda con la selección y ha demostrado con creces que está a la altura de ser el rematador que un club de la talla del Real Madrid merece. Por eso la directiva madridista no debería jugar demasiado tiempo con fuego y pagar lo que corresponde por este gran futbolista, no debería especular con estrategias por ahorrarse cinco o diez millones de euros calibrando de mala manera el valor incalculable de un delantero así. Si no se equivocan, si son inteligentes de verdad, sabrán aprovechar la oportunidad de amarrar una indudable garantía en la punta del ataque. Es el momento.

Miguel Ángel Utrillas